Elena, la princesa sirena



-----------------------------------------------------------------------------------

Vicente era un marinero del trirreme el Dorado, que iba a hundir el Parco, el trirreme del pirata Mala Rata. Él iba a ser el único superviviente en una batalla en la que dio la talla sin parar hasta que un golpe traicionero hizo que cayera a la mar.

-------------------------------------------------------------

------------------------------------------------------------------------------ 

 A lo lejos vio una isla y hacia ella nadó hasta que se cansó 

-No llego, no llego, tan cercana y tan lejana, para mí no hay mañana.

 Su cuerpo hasta el fondo del mar fue bajando. Una sirena llamada Elena y su amiga Selena, viendo que se iba a ahogar lo fueron a ayudar.

----------------------------------------------------------------------------------

--------------------------------------------------------------------------------

Lo subieron a la superficie para que pudiera respirar y luego lo dejaron sobre a arena de la playa de la isla de las sirenas. Vicente les dijo gentilmente: 

-Todo marinero sueña con encontrase con una sirena y yo me he encontrado con dos, desde hoy creeré que en el mar hay un dios?

Las sirenas tenían prohibido hablar con los humanos pero Elena la prohibición se saltó y con Vicente habló. 

-Hay varios dioses en el mar, pero Poseidón es el dios de los dioses.

-----------------------------------------------------------------------------------

------------------------------------------------------------

Selena, la otra sirena, con una mano le tapó la boca. 

-Calla, loca, que por salvarlo ya hemos desobedecido, y por hablarle el castigo puede ser desmedido. 

Se fueron dejando a Vicente abrumado, pero agradecido por haberlo salvado.

Al lado de la isla y en las profundidades del mar estaba el Palacio de Oro donde vivían las sirenas, a las que los peces odiaban por que se los zampaban y a él se fuero nadando la sirena Elena y su amiga Selena.
-----------------------------------------------------------------------------------

-----------------------------------------------------------------------------------

-¡Es tan bonito el naufraguito -le decía Elena a su amiga Selena. 

-Es un humano, y como todo humano si le das un dedo te coge la mano.

-Es hermoso, es precioso.

-¡Ni se te ocurra volverlo a ver! 

Elena se reía, y le dijo en un acto de coquetería.

-Eso es cosa mía.

Una sirena las interrumpió y les espetó: 

-La reina os quiere hablar. No la hagáis esperar.

Elena á los ojos la miró y le preguntó:

-¿De que, María José?

-Y yo que sé.

Llegaron a la sala del trono de Magdalena, la reina de las sirenas, y esta cuando las vio, como el el palacio se sabía todo, les preguntó:

-----------------------------------------------------------------------------------



--------------------------------------------------------------------------------

-¿Se salvó algún humano del ataque del barco del pirata Mala Rata?

Selena sonrió y le mintió.

-No, majestad, del barco que el pirata Mala Rata hundió, nadie se salvó.

-----------------------------------------------------------------------------------


-----------------------------------------------------------------------------------

-No está bien decir una mentira para salvaros de mi ira. ¡¿Cuántas veces tengo que decir que a un humano que se va a ahogar no se le debe salvar?!

Con cara de tristeza, las dos sirenas bajaron la cabeza.

-Además tú, Elena, eres la prometida de Tritón y si el humano se hiciera contigo ilusiones, lo mataría sin  contemplaciones. ¿Me tienes algo que contar antes de que os mande encerrar?

-Sí, yo fui la primera en ir a ayudar al humano y la única que le habló, majestad, encerrarme a mi y dejad a Selena en libertad.

-Ya lo sabía. Por decir la verdad no os privaré de vuestra libertad, pero a ese humano nunca jamás te vas a acercar. Si lo haces me voy a enfadar y lo vas a lamentar.

Tenía prohibido volverlo a ver, pero Elena vigilaba cada día lo que Vicente hacía, eso sí, sin que él supiese que andaba por allí. La reina lo sabía porque tenía más de una espía, pero como a Vicente no se acercaba, la dejaba. No se acercaba hasta que Vicente, por matar el aburrimiento, a una pequeña isla nadó, y pensando que no la verían a él se acercó.

---------------------------------------------------------------------------------


------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

-Creí que no te iba a ver más después de salvarme la vida, querida.

-¿Querida? No me digáis eso que estoy prometida.

-Querida, querida, querida y amada, amada y soñada, soñada y deseada.

-La soledad te ha trastornada y te crees de mi enamorado. Soy una sirena, cabezón, y mi sino es casarme con Tritón.

-No, si yo lo puedo evitar, y si tengo que pelear por ti, voy a pelear.

-Mi prometido es el hijo de Poseidón, cabezón.

-----------------------------------------------------------------------------------



-----------------------------------------------------------------------------------

-Como si fuera el mismísimo Poseidón, y  no me llames más cabezón.

Elena vio a una sirena saludándola desde el mar y supo que a Palacio de Oro ya no podía regresar. 
-----------------------------------------------------------------------------------
-----------------------------------------------------------------------------------
Lo que no sabía era la que se iba a amar, ya que el Tritón, al enterase de que su prometida lo había cambiado por un humano desgarbado, llamó a su no reconocido hermano Tano y se fueron a a quitarle a ella las escamas y a él la piel.
-----------------------------------------------------------------------------------


----------------------------------------------------------------------------------
Aquello era la guerra, pues Magdalena, la reina de las sirenas, no iba a permitir, ni por las malas, ni por las buenas, que le hicieran daño a una de sus sirenas. A las otras sirenas reunió y así les habló:

-Elena ha desobedecido lo establecido y ahora la quieren eliminar. ¿Quién está dispuesta a pelear a coletazo limpio contra esos dos matones abusones? 
El "¡yo!" Fue un clamor en aquellas sirenas llenas de valor.
Luego se fueron a esperar a los abusones que a la isla de las sirenas iban a llegar.
-----------------------------------------------------------------------------------

----------------------------------------------------------------------------------
Cuando los tritones vieron a las sirenas dispuestas a pelear comenzaron a reírse sin parar, pero la risa se les iba a acabar, pues Poseidón apareció  en su barca de oro y se puso al frente de las sirenas, (entre las que estaba la sirena Elena) y le dijo con su vozarrón a su hijo Tritón: 

-No hacían falta que llamaras a tu hermano para enfrentarte a un humano, eso demuestra que eres un cobarde que no se merece a la sirena Elena.
-----------------------------------------------------------------------------------

----------------------------------------------------------------------------------
Tritón, que era un mal hijo, a su padre le dijo: 

-Que el humano se quede con Elena hasta que los dos se mueran de pena, porque procrear, no van a procrea y a mí lo que que me sobran son sirenas para jugar. 
-¿Es que no vais a pelear después de tanto alardear? 
-No, contigo no vamos a pelear porque no llevamos las de ganar, pero algún día me voy a vengar por lo que acaba de pasar.  
-----------------------------------------------------------------------------------
----------------------------------------------------------------------------------

A Poseidón las palabras de su hijo le dieron que pensar, así que cuando la sirena Elena llegó a la arena, en vez de cola tenía piernas hermosas, maravillosas y cubiertas por una falda hecha de algas.
Cuando Vicente la vio, exclamó: 

-¡¿Qué te pasó?! 

Emergiendo de las olas del mar, le dijo Poseidón con su vozarrón:

-Pasó que he convertido a una sirena en mujer, y más te vale amarla y respetarla o iré a por ti estás donde estés. 
-----------------------------------------------------------------------------------
----------------------------------------------------------------------------------

Vicente se llevó un susto morrocotudo y se le hizo en la garganta un nudo, pero enseguida se le pasó y a Poseidón así le habló:

-La amo demasiado como para hacer algo que la aparte de mi lado.

El tiempo pasó, un barco en la isla los vio y al puerto de Rodas los llevó.
------------------------------------------------------------------------------



-------------------------------------------------------------------------
Y hasta aquí hemos llegado porque este cuento se ha acabado.

Fin


Comentarios

Entradas populares